martes, 13 de julio de 2010

S&P SE DISTRAE CON OTROS


Triple A y perspectiva negativa. Es lo que la agencia de calificación crediticia S&P mantiene para Reino Unido. Reconoce la agencia que en su análisis asume para la economía pronósticos menos optimistas que los contenidos en los presupuestos, y de paso advierte, que el nivel general de deuda gubernamental puede estar próximo a un punto incompatible con la máxima calificación. Lanzada queda la advertencia, paso previo a que tarde o temprano se vea en la obligación de lanzar semejante aviso sobre la deuda norteamericana. Si en algo influye la opinión del muy conocido economista norteamericano Martin Feldstein, defensor del dólar débil como base de cualquier estrategia de política económica, no habría de tardar mucho. Según el quien fue jefe de asesores económicos de la Administración Reagan, la economía norteamericana está todavía en recesión, y es la FED la que la sostiene.

La reacción de los mercados ha sido modesta. La libra ha hecho un breve viaje de ida y vuelta, tanto en su cotización con el dólar como en su cruce con el euro. La sesión europea había comenzado con cierta fuerza a la par que lo hacían las acciones de BP cuya cotización alcanzaba el máximo de un mes. A media sesión, el anuncio de S&P se encargó de abortar esa recuperación.

Más seria fue la advertencia que la agencia hacía ayer a Japón. Las elecciones parciales al senado que se celebraron el fin de semana han resultado en la pérdida de la mayoría de la cámara alta del actual Gobierno cuyo Primer Ministro apenas cumple un mes en el cargo. A pesar del empeño que ha puesto en sacar adelante un plan de consolidación fiscal, la pérdida de mayoría, junto al hecho de que sea el quinto primer ministro en los tres últimos años, lleva a la agencia a advertir al país de que puede recortar su calificación crediticia. Japón cuya deuda pública es cercana a dos veces su PIB (en España apenas supera la mitad), sufrió un recorte de su calificación por S&P en febrero de 2001. Perdió la triple A. Desde entonces, su calificación se ha mantenido en AA, con sucesivos cambios de expectativas de neutrales a positivas y negativas, que están ahora en territorio neutral tras la última revisión desde negativa efectuada en abril de 2007. Menos cambios sin embargo en el yen que en la libra. A pesar de todo, es buena la ocasión para recordar a los menos familiarizados, que frente al euro, el yen acumula desde el verano de 2008 una apreciación cercana al 40%.

Al menos durante un tiempo, los focos dejan al euro. Pero, ojo, porque el BCE parece dispuesto a confiarse. Cada vez compra menos deuda. En su semana nueve, compra 1MM€, frente a 16,5MM€ en la primera. Y en descenso constante. ¿Es Alemania lo que pesa o el BCE el que se confía?

4 comentarios:

  1. Cuando creíamos que teníamos todas las respuestas, de pronto, cambiaron todas las preguntas-
    Hace unas semanas atendia entusiasmado a un debate sobre el euro. Uno de los ponentes afirmaba que si no estuvieramos en el Euro, entre otras medidas devaluariamos.
    No sin cierta sorna, le indicaron que mejorar la "productividad" era la solución para mejorar la competitividad.
    Sin embargo la posicion del dolar frente al Euro y frente a la libra, deduzco que es un vector estrategico para USA, o alguno de sus sabios, antes de esta crisis y mucho mas ahora.
    En estos dias en los que nuestros planteamientos y nuestros objetivos son bien distintos, no seria logico preguntarse si nuestras reglas tambien podrian serlo?

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  2. Me gusta lo del cambio de preguntas cuando creiamos tener todas las respuestas. ¡Que facil venta tiene el decir "lo sabemos todo"! Pero creo poco en aprender de la leccion. Simplemente porque el dolor no se reparte. Cae, de modo indiscriminado. Es tan amplio su reparto que a los causantes, lo que les cae, ni lo notan, ni les inmuta. Siguen. El tipo de cambio es uno de los mecanismos de ajuste con mas capacidad de repartir a ajenos dolor propio. Los que puedan, no lo perderan. Un placer leer tu reflexion DTI.
    Gracias
    Un abrazo

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  3. Hola José Manuel.

    ¡Ya era hora de que miraran hacia otro lado! Justo lo que comentábamos hace algunos días cuando hablábamos de los agoreros de “The telegraph”, la situación británica no es ni mucho menos para echar cohetes, ahora faltar por ver si las reformas fiscales consiguen evitar la rebaja de su rating.

    Personalmente el escenario japonés me resulta más preocupante, quizá porque soy un enamorado de su cultura y creo que tiene difícil solución. “Los hombres que compran bonos japoneses son populares entre las mujeres”, ese era uno de los eslóganes utilizados por el gobierno para colocar sus bonos entre la población, la herramienta con la que se ha financiado en las dos últimas décadas y con la que ha acumulado tan brutal déficit. De momento el superávit de la balanza comercial y de la de rentas había servido de sustento para el país, pero con una de las poblaciones más longevas del planeta la tendencia del gasto público tiene que ser ascendente a la fuerza, mientras que la población activa, y por ende la recaudación de impuestos, irán disminuyendo progresivamente. Espero que finalmente llegue ese plan de consolidación fiscal y que podamos ver una reducción en su déficit, al menos de momento. Sobre la espectacular recuperación del yen desde el 2008, nada que añadir. Bueno si, expresar mis condolencias por todos aquellos que contrataron su hipoteca en yenes por esas fechas...

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  4. Magnifico análisis Mikel. Comparto mucho de lo que dices, incluida la admiración por la cultura japonesa. Admiración porque me sorprende. Es una sociedad que sacrifica bienestar a cambio de mantener sus valores. Ellos saben lo que es perder una guerra de la forma que la perdieron. Decidieron trabajar y ahorrar, pero tambien no abrir las puertas a extranjeros. Pero son coherentes, pues apenas el 17% de su deuda publica es financiada por extranjeros. Ellos pagan su fiesta. Pueden estra equivocados, pero pagan ellos. No ha sido el caso de muchas de nuestras potencias occidentales, y desde luego tampoco el de España.

    Participo tu pesame a los que insensatamente financiaron la mayor inversión de su vida en otra moneda distinta a la de sus ingresos.

    Un abrazo

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