Que la ciencia avanza que es una barbaridad, no lo habrá dicho Churchill, habitual en esto de las citas. Que un humano corriente pueda tomar una secuencia de video con su móvil en Madrid, enviarla al instante a un pueblo de Indiana en EE.UU. para comentarla después en una video llamada doméstica a través de ordenador, y al poco tiempo compartir una reflexión instantánea sobre un asunto de actualidad con un colega en Chile, para después intercambiar documentos con otro que está en Hong Kong, y todo en el mismo día y sin haber desembolsado ni un céntimo de euro, sería simplemente increíble hace solo 10 años.
Todo eso han cambiado las cosas en 10 años, y sin embargo Japón continua con idéntico PIB. De hecho lleva con el mismo casi 20 años. Más increíble todavía, ¿no? Incluso sigue preocupado por lo mismo de entonces, la apreciación del yen. Menos mal que se financian a si mismos. Será eso lo que les mantiene donde están, pero no es estúpido preguntarse si acaso son tontos que no saben aprovechar lo que la ciencia ofrece, y encima se les aprecia la divisa.
Ayer nos referíamos a una crónica que hablaba del potencial bajista del euro frente al dólar. Desde Singapur. Hoy otra anunciando estrictamente lo mismo, pero del dólar, desde Nueva York. Todo en tiempo real.
Que pueda haber opiniones, razonadas y razonables, y al tiempo tan diversas sobre un clásico como el tipo de cambio, puede también resultar increíble.
Increíble, pero normal.
PD: ¿Y este video? Es el Obradoiro de Santiago este verano. Tecnología sobre piedra milenaria y forma de celebrar este POST. Es el número 50. Muy lejos de los más de 500 que lleva alguno de sus lectores. Pero todo se andará. Buen fin de semana.
Jose Manuel
ResponderEliminar¿Qué tal el verano?
Estuve en Galicia....ah! ¡qué delicia! visitando a mi familia que es mucha y dispersa para mi fortuna.... de Mondoñedo a La Guardia, je-je
Cuidate
Muy buenas Jose Luis,
ResponderEliminarEncantado de tener noticia tuyas. Yo tambien estuve, y también al norte y al sur. Un tiempo increible, y lo demás también, pero esto último ya es norma. Bienvenido. Un abrazo