Mañana miércoles está Jim Rogers en Madrid. Pero eso usted ya lo sabe, porque habrá recibido la invitación para acudir a su encuentro a las 19:00 horas en la Fundación Rafael del Pino. Después del partido. Si puede, intente no perderse esta oportunidad.
Decía el famoso inversor en una entrevista el jueves pasado en la CNBC que “ahora está todo el mundo tan bajista en el euro, que parece el mejor momento para comprarlo”. Reconocía, sin embargo, sentirse tan confuso como cualquiera, y señalaba que estaba bajista en renta variable y alcista en materias primas, pero tratando de hacerse una idea definitiva sobre si ponerse alcista en el euro. Rogers que lleva largo tiempo apostando por las materias primas, es de la opinión que los gobiernos no tendrán más remedio que imprimir dinero como única salida a los problemas de la deuda, lo que revivirá la inflación.
Viene ahora a cuento lo que me decía ayer por la tarde un buen y preocupado amigo, gestor de patrimonios que sin duda no se perderá la conferencia del norteamericano: “si se te ocurre algún activo refugio coméntamelo,…por cierto los lingotes de oro a partir de 250 gr están agotados en toda España, sólo quedan de 100 gr, esta mañana he comprado para mi,...”.
Así las cosas, no sorprende que Martin Wolf, señale en su columna de FT que es fácil para Japón hacer desaparecer su deuda. Señala el británico que justo ahora que el temor es la deflación, bastaría con alargar el vencimiento medio de la deuda hasta 15 años, y poner a un experto en generar inflación al mando del banco central, para que comprando activos públicos y privados y marcando un objetivo de inflación del 3%, lleve el tipo de interés del bono a largo plazo al 5% y si todas las demás variables se mantienen sin cambios, inducir una depreciación de la deuda del 40%. De un plumazo. Es decir, que casi la mitad de la deuda amortizada por inflación.
No es extraño que mi amigo, el del oro, haya decidido colocar sus recursos en letras alemanas a 3 meses. En nuestra conversación de la semana pasada, traté de convencerle sin mucha fuerza ni éxito de que no era inevitable el que España acudiese al mecanismo de asistencia creado el 9 de mayo. Claro que para reforzase en su temor, solo faltó lo publicado dos días después por la versión alemana de FT, en la que insistía ayer Frankfurter Allgemeine. No le pregunté, pero por su bien, espero que no haya leído la crónica de Phill Bennet, exdirector adjunto del Washington Post, que sobre España publicaba el domingo El País, tomando como base el toledano caso de Villacañas. Dice en su último post un amigo economista, que bien podía haber elegido el coruñés caso de Arteixo, -allí está la base de Zara-.
Tendrá o no razón Rogers para preguntarse sobre el euro, pero el caso es que la moneda única ha salvado sin demasiados aspavientos la rebaja en cuatro escalones de la deuda pública griega anunciado ayer por Moody´s. De A3 a Ba1, es decir a bono basura. ¡Pues que viva Rogers!
Y ahora un poco de humor. Deferencia de mis amigos de Diario Crítico. La protagonista opina sobre la actualidad económica y politica del momento. Tanto local como nacional.
Como fue Jim??? ya tengo nueva entrada!!! Aún no me he comprado vuvuzela... pero está al caer!!
ResponderEliminarEstuvo genial. La verdad es que responde más al perfil de un vendedor que al de un inversor. Dice que le gusta España, alfgo que en estos tiempos gusta escuchar. Creo que no sigue el Mundial, de modo que debe de referirse al pais, y no a la "roja". Tendrás que hacer algo para que efectivamente pierda Honduras.
ResponderEliminarQue te vaya bonito en el Sur, and...take care!
Un abrazo